Francisco Pérez Bes, reconocido experto en derechos digitales, ofrece una perspectiva exhaustiva sobre el estado actual y futuro de la regulación de la Inteligencia Artificial (IA), señalando 2023 como un año crucial en su evolución. El lanzamiento de versiones avanzadas como GPT-4 y la integración de IA en herramientas cotidianas han marcado un cambio significativo en la sociedad y la tecnologÃa. Con la rapidez en el desarrollo de la IA, la regulación se enfrenta a desafÃos sin precedentes.
El enfoque de «risk approach» ha sido la estrategia predominante para regular la IA, centrado en los riesgos derivados de su uso para proteger derechos y libertades fundamentales. Este enfoque intenta garantizar que las normativas sean duraderas y pertinentes a pesar del avance tecnológico.
Pérez Bes identifica áreas clave que probablemente destacarán en 2024 en el ámbito de la IA:
- Ética y Buen Gobierno: La ética seguirá siendo un tema central en el debate regulatorio, enfocándose en la gobernanza corporativa de la IA, la privacidad, los sesgos algorÃtmicos y la toma de decisiones automatizadas.
- Transparencia y Explicabilidad: Con sistemas de IA cada vez más complejos, comprender y explicar sus decisiones se vuelve crucial para asegurar su legalidad y ética.
- IA Conversacional Avanzada: Se anticipa una evolución hacia sistemas más avanzados y contextuales, donde los asistentes virtuales y chatbots serán más naturales y precisos.
- Inteligencia Artificial y Ciberseguridad: A medida que las amenazas evolucionan, también lo harán las defensas, adaptándose para detectar y prevenir ataques de manera más efectiva.
- Colaboración Humano-Máquina: Se explorará cómo los sistemas de IA pueden mejorar y complementar las habilidades humanas.
- Inteligencia Artificial Cuántica: La combinación de computación cuántica con IA promete avances significativos en la resolución de problemas complejos.
El inminente Reglamento de Inteligencia Artificial marcará un nuevo escenario regulatorio y traerá nuevas obligaciones para las empresas. Las sanciones previstas para las empresas incumplidoras serán significativas, lo que subraya la importancia del cumplimiento normativo o cibercompliance. Esto requerirá un conocimiento profundo de las normas y su impacto en el negocio, asà como asesoramiento legal especializado.
En resumen, el futuro de la IA en 2024 se perfila como un año de avances significativos, desafÃos regulatorios y un enfoque continuo en la ética y la seguridad. Las empresas y los individuos deben estar preparados para adaptarse a un entorno tecnológico y legal en rápida evolución. Para una comprensión más detallada, el análisis completo de Francisco Pérez Bes está disponible en Democrata.es.